Vamos a decirlo… ¡y a mucha honra!:
Aferrados a la viva dignidad campesina y las memorias de los 70 Detenidos Desaparecidos y Ejecutados Políticos de Paine, razón y germen de la existencia del Memorial Paine, se cumplieron 50 años y nuestra gente no ha visto justicia. Paine sigue sin justicia, no sabe de justicia.
Y no andamos buscando culpas de por qué ni el por qué. De buscar, llevamos 50 años. Sabemos las NO razones del odio que nos dejó sin nuestra gente. Sabemos quiénes fueron. Del listado de genocidas, entre policías, milicos y civiles cagones y serviles de la patronal, la mayoría murió impune. Sabemos que otros van por ahí con su sucia e intranquila consciencia, deambulando por entre las callecitas todavía polvorientas de nuestro querido Paine.
Sabemos. Por eso somos memoria; setenta memorias y sus herencias. Sabemos (y vamos cada día sabiendo) y por eso lo nuestro es impedir que sus crímenes se repitan. De eso se trata defender y porfiar la memoria.
En Memorial Paine nos jugamos a diario para poner a salvo y a bien resguardo de futuro las memorias de los 70 Detenidos Desaparecidos y Ejecutados Políticos de Paine. Lo hacemos desde la vida y con el amor que cada familiar nos brinda cotidianamente. Y si alguien no cree, venga y mire cada uno de los setenta mosaicos que recuerdan a los paininos que el odio patronal pretendió dejar en el olvido.
Sus sueños, sus acciones sembradas y cosechadas a punta de ojotas, azadones, palas, chupallas y rastrillos, surcan todavía la dignidad que siempre hacemos costumbre. Así, tal cual reclaman y remarcan los sin tierra y ‘los nadie’ del presente.
Vamos a seguir en ello, pierdan cuidado… ¡así sean 100 años, la memoria no se rinde, campesinas, campesinos!
A 50 años el sinsabor es el de siempre: justicia a goteras, mezquina; caritativa. Hemos visto partir a madres y viudas de este Paine y sus asuntos tan propios, que solo su gente sabe. Entonces, vamos a seguir porfiando. De eso se trata la memoria… las memorias.
La memoria y ustedes
Gratitud por tanta gente bien nacida de esta tierra que retomó el coraje. Regocijo por esa juventud y las niñeces paininas y de otros pagos que, en cada actividad que con tremendo amor les entregamos, desafiaron el silencio y el miedo y se empaparon de las vidas que cada mosaico contiene como propuesta de continuidad y aroma de tierra fértil para que un mundo distinto sea tangible en igualdad y justicia.
Gracias a cada una de las personas que se acercaron a recorrer estos lugares que es el Memorial… sus setenta lugares; sus setenta historias.
Sepan que cada mosaico es ustedes; ustedes que estuvieron allí y se llevaron para siempre en sus memorias a un viejo Vidal bueno pa’ la pelota, allí en Escorial; al profe Leiva con la a, e, i, o, u para los campesinos asentados; al ‘guapo’ del ‘Tavito’ Martínez, dicen todavía los dignos amores de algunas muchachas de entonces. Sepan también a Luis Díaz y su jardín de rosas y Juana enamorada. A todos ellos se llevaron ustedes en sus memorias gigantes y lo que ellas nos heredaron, por venir aquí.
Cada uno de ustedes le dio sentido a nuestra labor. Cada gente que pisó el cuarzo que cobija las dignas memorias e hizo crujir este lugar con su caminar, le dio sentido a nuestro día a día. Y también a la vida que aquí, a diario, a cada instante, al son de queltehues, vamos poniendo en dignidad y forma.
Contentos y agradecidos de ello, les compartimos lo que fue este año cíclico; los 50 años. Lo hacemos con cariño, mucho. Lo hacemos perfumados de matas de sandías que un 29 de diciembre de 2023 acaban de asomarse a la entradita sur de este espacio de vida que bien tiene puesto su nombre: Memorial Paine … ¡Memorial del Cielo Azul!
¡Así sean 100 años, la Memoria NO se Rinde, patrones de la miseria!
Revisa aquí la Memoria 2023 de Corporación Memorial Paine, un lugar para la memoria:
